Sabemos ya, que un servicio de alineación y balanceo son un conjunto de procedimientos realizados en los neumáticos y las ruedas de un vehículo para garantizar un rendimiento óptimo, seguridad y durabilidad. Son fundamentales para mantener el buen estado y la eficiencia del sistema de dirección y suspensión de un tractocamión. ¿Pero, vale la pena hacerlo sin antes realizar un mantenimiento preventivo de la suspensión?
Durante el mantenimiento preventivo, se pueden identificar y corregir desgastes o problemas en los componentes de la suspensión, como los amortiguadores, los bujes, entre otros. Estos problemas pueden afectar la capacidad del vehículo para mantener una alineación adecuada y un balanceo correcto de las ruedas.
Si la suspensión mecánica tiene desgastes o problemas, es posible que la alineación de las ruedas no se pueda realizar correctamente. La corrección de estos problemas antes de la alineación garantiza que el vehículo pueda ser alineado de manera precisa y que los ajustes realizados duren más tiempo.
Si se realiza únicamente un servicio de alineación y balanceo sin abordar los problemas de la suspensión, es probable que los ajustes no duren mucho tiempo y que se presenten problemas nuevamente en poco tiempo. Realizar primero un mantenimiento preventivo asegura que el vehículo esté en condiciones óptimas para recibir los ajustes de alineación y balanceo.
En resumen, realizar un mantenimiento preventivo de la suspensión mecánica antes de un servicio de alineación y balanceo es crucial para garantizar que el vehículo esté en óptimas condiciones para recibir estos ajustes y para evitar problemas posteriores. Esto contribuye a la seguridad el desempeño y la durabilidad del vehículo.
Mantener la suspensión en condiciones óptimas antes de realizar otros servicios garantiza un mejor desempeño y una experiencia de manejo más segura y cómoda.